Con las manos en la masa
Después de un par de días de nuevo ante los fogones me reitero en mi opinión de que hay pocas cosas más sensuales que cocinar. Creo que ahora comprendo la manía de alguno de mis ex-amantes de querer hacerme un plato de pasta o de poner ante mí un elaborado plato japonés.
Es extraño decir la razón. En realidad, no hay nada que lo explique. Sólo que el tener la sartén al fuego, con los ingredientes dorándose lentamente, o los hervores de los caldos y los pucheros en la cacerola, a mí, me evocan pensamientos de lo más lascivos.
Mejor ni hablar de la elaboración de postres...
Es extraño decir la razón. En realidad, no hay nada que lo explique. Sólo que el tener la sartén al fuego, con los ingredientes dorándose lentamente, o los hervores de los caldos y los pucheros en la cacerola, a mí, me evocan pensamientos de lo más lascivos.
Mejor ni hablar de la elaboración de postres...
2 comentarios
Mae -
brocco -
cocinar para luego manducar, grandes placeres :)