Sueños de un astronauta
La misión resultó un fracaso. Cuando llevábamos 5 años luz de viaje, el módulo de sueño asistido quedó afectado por el choque con un pequeño asteroide (algo me hace pensar que era una partícula de basura espacial, que tanto abunda por el espacio desde los viajes interestelares humanos).
Nos despertamos los 6 tripulantes a sabiendas de que ya no podríamos dormir nunca más. Las comprobaciones realizadas por el ingeniero así lo confirmaron. El sueño estático estropeado sin remedio. Y después vino lo de aquella masa de meteoritos...
Tras la explosión de la nave, fuimos expulsados al exterior, dentro de nuestros trajes autónomos que nos permitían comunicación y supervivencia casi eterna, gracias a los equipos de reciclaje de aire, exudaciones y excrementos.
Nos fuimos separando en el extenso universo. Ahora hace ya casi 2 años que estoy sólo. ¿O son dos meses? La verdad es que no hay diferencia. El único consuelo que encuentro son los sueños.
Alguien dijo una vez, siglos atrás, que cuando un astronauta vaga por el espacio, a millones de kilómetros de nada, cuando todo a su alrededor es lo mismo, es constante; sus sueños, ricos en imágenes y recuerdos, pasan a ser tan reales, tan... lúcidos, que la vida real y el sueño se invierte.
Quién sabe. Puede que ahora mismo seáis todos parte del sueño de un astronauta...
Nos despertamos los 6 tripulantes a sabiendas de que ya no podríamos dormir nunca más. Las comprobaciones realizadas por el ingeniero así lo confirmaron. El sueño estático estropeado sin remedio. Y después vino lo de aquella masa de meteoritos...
Tras la explosión de la nave, fuimos expulsados al exterior, dentro de nuestros trajes autónomos que nos permitían comunicación y supervivencia casi eterna, gracias a los equipos de reciclaje de aire, exudaciones y excrementos.
Nos fuimos separando en el extenso universo. Ahora hace ya casi 2 años que estoy sólo. ¿O son dos meses? La verdad es que no hay diferencia. El único consuelo que encuentro son los sueños.
Alguien dijo una vez, siglos atrás, que cuando un astronauta vaga por el espacio, a millones de kilómetros de nada, cuando todo a su alrededor es lo mismo, es constante; sus sueños, ricos en imágenes y recuerdos, pasan a ser tan reales, tan... lúcidos, que la vida real y el sueño se invierte.
Quién sabe. Puede que ahora mismo seáis todos parte del sueño de un astronauta...
2 comentarios
DuNa -
Un saludo
Sergi -
Saludos de un poeta desubicado.