Persecución
El fauno ya corría tras la ninfa, como cada tarde, para intentar satisfacer sus instintos más primarios... Y como cada tarde, tropezó y la vio alejarse para, tras conseguir algo de ventaja, pararse tras un árbol y volverse, con una mirada lasciva, para provocarle...
Él, cansado del juego eterno, dio por fin media vuelta y se alejó, para perseguir a cualquier otro ser místico, para vengarse de los designios divinos, para demostrarle a ella, y demostrarse a él, que no la necesitaba.
Aunque esto realmente no fuera cierto...
Él, cansado del juego eterno, dio por fin media vuelta y se alejó, para perseguir a cualquier otro ser místico, para vengarse de los designios divinos, para demostrarle a ella, y demostrarse a él, que no la necesitaba.
Aunque esto realmente no fuera cierto...
3 comentarios
Amanda -
Saluditos.
Último hombre debil -
... T_T
Gorak'Morka -
como ningún otro ha comentado
ezte cuentecillo
te diré que me parece una mierda!!!!!!!!
Ke no que ez coña. Para zerte
zincero te diré que me recuerda
a un viejo mito clásico, pero
q no recuerdo ahora mizmo.
Ke zi me guzta, y me guzta el
intento (vano) del prota de
ezcapar de zu deztino
De todoz modoz no podrá ezcapar
ezta jodidamente atrapado
puez de hecho ni ziquiera lo desea
realmente. Por cierto, ella ez
una calienta pollaz, ez decir
una hija de puta, o zea, una
tía tipo jorge, podría dejarze
violar como ez debido no?
En el fondo, ella también moriría zi
zi el no la perziguieze (o ezo
me guztaría penzar, puez cino ez
una zorra, aunque menoz de lo
que noz guztaría). Cordialez Zaludoz