Dedicatoria

Aquella mañana la Luna la despertó ronroneando sobre la cama. Se levantó y se sorprendió al descubrir que tenía unas ganas tremendas de escuchar aquel disco de Javier Álvarez que hacía tiempo que estaba aparcado en la estantería.

Se metió en el cuarto de baño para asearse tarareando...

"Mamá se va papá... mamá se va papá..."

Ya vestida y aseada entró en la cocina, no sin antes pasar por su habitación de nuevo para sacar el enorme regalo que llevaba escondido bajo la cama desde hacía unos días.

En la cocina, se le acercó por la espalda, le tapó los ojos, dejó con delicadeza el paquete entre la taza de café con leche y las tostadas, y mientras le destapaba los ojos, le dio un beso y añadió un "Felices 63, papá... te quiero", junto con un fuerte abrazo.

4 comentarios

[cris - 07 de enero de 2004 - 20:18]

A veces es un poco maravilloso ver como un padre ejerce de padre , pero en mi caso es tb maravilloso ver que tengo en mi pa a un compañero de fatigas. Un beso papa por haberte reido cuando me cargue el cristal de la mesa.

[oroD - 07 de enero de 2004 - 13:10]

Últimamente me visitan personas, que en muchos casos sólo pasan por aquí, y en otros, son como una bruma... Y sin embargo dejan huella. Aún sin comprenderos, sin saber si os referís a mí o a itra gente que comenta mis posts... Quiero que sepáis que esta basurilla de blog es tanto mía como vuestra... Gracias a todos.

[Sigo pasando por aquí - 06 de enero de 2004 - 18:13]

No sé, no entiendo muchas cosas. No entiendo por ejemplo el efecto del tiempo sobre los sentimientos, las impresiones, los recuerdos, los puntos de vista sobre algo en concreto. Y me fastidia, porque a veces querría acelerar esos efectos. El tiempo ha hecho, por ejemplo, que me entren ganas de decirte gracias por haberme confiado (a mi también) este episodio de tu vida y que pueda comprender esta dedicatoria y tu respuesta.
Feliz 2004.

[Guadalupe - 05 de enero de 2004 - 13:51]

Durante unos segundos le he oído toser, he olido su colonia en el cuarto de baño y he escuchado la cucharilla dar mil vueltas en el vaso de café...
Luego he llorado al darme cuenta de que sólo era un recuerdo, pero después me he dado cuenta de la suerte que tengo al guardar tantas cosas de él... incluído el mal genio a veces...
Sigue cumpliendo años, pero en mi recuerdo sigue igual de guapo :-)

Mi niño... muchas gracias :-)