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Bajo Arboles Mojados

Perdona

Perdona que te aborde así,
pero es que estoy cansado,
tan cansado de conocer imbéciles,
que cuando encuentro a alguien sincero,
la cabeza se desconecta y me comporto
de una manera un tanto lanzada.

Perdona, digo, que te asedie como lo hago,
pero el desengaño me ha llenado tanto,
las mentiras y las falsedades,
que al ver un persona sencilla
el corazón se me acelera y actúo
como un loco inconsciente.

Perdona por último la impaciencia,
la responsabilidad de saberte quizás
la última persona que pueda mantenerme a flote,
la última persona que me haga sonreír,
la última persona en quien confíe,
a ciegas,
antes de renegar de esta maldita humanidad.

5 comentarios

Pasaba por aqui -

Cris, como te quiero por ese comentario! Yo lo aprendí por las malas eso mismo. Lo bueno de eso es que se te graba en la mente al rojo vivo, y en cuanto surge el peligro de volver a caer en el error de dejar en manos de alguien tus sentimientos, tu dignidad e incluso tu vida...renacen en color brillante esas palabras...que no pronunciaré aqui!

cris -

ya estaaaaaamos.
La mejor manera de salir a flote es por uno mismo: de nada te sirve aferrarte a otra persona que puede ser que más tarde te hunda más.
No sirve de nada, es sólo un parche. Quien dijo que la mancha de la mora con otra verde se quita es porque era un gusano de seda.

oroD -

Aldeana, el problema es si tarda demasiado en llegar... La verdad, hoy he conocido a alguien sincero y sencillo... :)

Aldeana -

Justo antes de renegar del mundo... afortunadamente, siempre aparece alguien especial... estate atento...

& -

real como la vida misma..