Blogia
Bajo Arboles Mojados

El que escucha

Un día, a la salida de sus clases de teatro, se cruzó con una mujer llorando, y se sorprendió a sí mismo acercándose y preguntándole la causa de su llanto.

En un principio, la mujer parecía reticente a contarle nada, pero tras unos minutos de palabras llenas de confianza, le confesó que su marido le pegaba.

Tenía además dos niños que nada sabían de todo esto, en edad escolar. Y ellos eran la causa de que la mujer no dejara a su marido, pues carecía por completo de un sustento económico propio.

-¿Sabes? -dijo él-, es cierto que debes procurar lo mejor para tus hijos, pero si ellos te ven triste, no estarán mucho mejor que tú, porque aunque no lo parezca, se dan más cuenta de las cosas de lo que creemos.

Ella asintió resignada.

El joven le ofreció su número de teléfono móvil, aunque sólo fuera por si ella necesitara hablar; aunque la mujer rechazó la oferta algo alarmada, añadiendo que él no tenía porqué meterse en ese problema.

-Los martes y los jueves, a esta misma hora, termino mis clases de teatro, si me necesitas, sólo tienes que estar por aquí, y me encontrarás.

Más él ya nunca la volvió a ver.

3 comentarios

Sory -

Es una lastima... las agresiones y los malos tratos cada vez son más frecuentes ! Y también es una lastima que las personas que los sufren se aislen, se encierren en si mismas...Pero también habria que ponerse en su pellejo!...Menuda situación...
Un abrazo !

GeBeSa -

No t'has calfat molt el cap buscant tema per al article de hui, eh??. Està prou be.
Gracies per oferir-me el teu muscle, pero de moment tot va prou be...un bes enorme Doret.

Amanda -

-----------------------------------------------------------------------------no digo nada, todo lo diría.