Blogia
Bajo Arboles Mojados

Largo domingo de vagancia

Comienzo el sábado pensando que debo estudiar y a medio día del domingo compruebo que no he hecho prácticamente nada (son bienvenidos los reproches de Aldeana al respecto, me los merezco).

Me empeño en echar las culpas a la falta de costumbres y hábito que tengo tras mi Erasmus. Que no es que allí no hiciera nada (o sí), pero es que llevo tres meses sin tocar un subrayador, y ahora lo único que me apetece hacer son dibujitos con el amarillo fosforescente, y rellenar los espacios de las letras en las frases escritas sobre los apuntes (que a penas he leído).

Lateralmente, me descubro en mis continuas despedidas. De gente que se atreve a emprender el viaje que tanto miedo me da. De otras personas que parten a unas vacaciones merecidas y a las que voy a echar de menos.

Entonces abro los libros y no encuentro el consuelo necesario porque todos me dicen aquello que debería estar haciendo.

Frustrante.

Esta mañana, cuando ha sonado el despertador y lo he vuelto a poner para una hora después (ayer me pasé; pensaba volver a casa tres horas y media antes de lo que lo hice), el montón de apuntes sobre el escritorio se me ha echado encima para recriminarme mi falta de responsabilidades.

Tiene razón.

No valgo ni para basurero (y con un gran respeto hacia los basureros)…

3 comentarios

Aldeana -

Pues eso...
Es cuestión de ritmo, yo también lo he perdido... pero sólo son 2 días, aprovéchalos!!

anónimo 2 -

opino igual que anónimo 1, vales mucho mucho. yo lo sé.

Anónimo -

Pues yo creo que vales mucho, y para mucho. Anoxe stuve genial contigo y ls d la granja. Ns vems a mi vuelta! bss