Cerrando la puerta
Mientras cerraba la puerta del local, pasó por mi cabeza que quizá estaba cerrando algo más en mi interior.
Y recordé, en un instante fugaz, días de césped y mañanas de playa y tardes en la ciudad, robándonos besos por los rincones.
Y noches interminables, en las que casi rezábamos para que no amaneciera.
Y unas zapatillas de andar por casa que se quedan bajo tu cama.
Y entonces, llovieron galaxias, todas por ti...
Y recordé, en un instante fugaz, días de césped y mañanas de playa y tardes en la ciudad, robándonos besos por los rincones.
Y noches interminables, en las que casi rezábamos para que no amaneciera.
Y unas zapatillas de andar por casa que se quedan bajo tu cama.
Y entonces, llovieron galaxias, todas por ti...
1 comentario
* -