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Bajo Arboles Mojados

Libros...

Libros... Cuando se dio cuenta de que no había nadie en el planeta capaz de devolverle todo el cariño que necesitaba, se refugió en las novelas de grandes romances y pasiones. Así, suplió sus carencias de amor, besos y sexo.

Pronto dejó de hacer deporte, pues le bastaba con abrir cualquier novela de viajes o aventuras para comenzar a sudar, respirar aceleradamente y sentirse mejor.

Con los libros de cocina llenó su estómago; con cuentos pobló sus noches de sueños, y de vez en cuando, leía alguna historia de terror para saciar su hambre de pesadillas.

Un tiempo después, sólo apartaba la vista de sus libros para ir al cuarto de baño...

4 comentarios

Juank -

Ya es hora de que dejes de leer y empieces a escribir tú el libro... te aseguro que lo compraría de primerito y me iría corriendo a que me lo autografiaras...

oroD -

Destacables... Hay muchos, según apetencias. Si quieres emocionarte con la delicadeza de las palabras, te recomiendo Seda, de Baricco. Si lo que quieres es una historia impresionante, Cien años de soledad, de García Marquéz. Si quieres reírte con lo mejor de la ciencia ficción, Ciberíada, de Stanislaw Lem es tu libro. Para leer algo de poesía, Habitaciones separadas es un muy buen libro... Y además, lo mejor de esto es que todos los libros los tengo, así que si quieres, quedamos y me los pides... Un abrazo!

meiko -

puede que leer es lo ke nos falte a muxos hacer... por los comentarios que leo pareces un gran lector...algun libro q destacar??puede que yo tb kiera empezar a introducirme en el mundo de los libros y que mejor de la mano de un amigo al otro lado del cable

Juano -

Eres el hijo pródigo de la lectura. Pasas un puñao de horas leyendo, yo no podría hacer eso. Leo, pero no tanto. A ver si le dices a este individuo que haga otras cosas aparte de leer, que los huesos se atrofian si no se mueven.